7. El primer día

Llegó el primer día en la nueva escuela. Bruna está cada vez más nerviosa pero con ganas de empezar. Sara se ha levantado antes para hacerle el almuerzo, estoy segura que está más nerviosa que su hija.

S:"-Oye he pensado que podía acompañarte.."

B:"-Emm, nop mamá. No lo veo apropiado..”

Jaune que escucha todo esto mientras desayuna no puede dejar de reir al ver a su mujer intentar ser guay con su hija adolescente.

Bruna llega a la escuela decidida a entrar.

Está muy segura de sí misma. Su abuela la animó a entrar con la cabeza bien alta. Siempre diva, que no vean tus puntos débiles.

Una vez dentro, no sabe por donde ir. Intenta buscar los vestuarios pero no hay manera. Menos mal que hay gente buena y una de ellas se ha parado a ayudarla.

"Tú debes ser la nueva..."

B:"-Sí, soy Bruna y ando un poco perdida"

Ju:"-Pues bienvenida, yo soy Judith, venga te enseño la escuela, pero rápido, que la clase de danza clásica empieza en breve y al profesor no le gusta que lleguemos tarde."

Judith le enseña las zonas comunes, las clases y por último, los vestuarios, donde se cambian rápidamente para la clase.

Por suerte les sobran unos minutos para que Judith le cuchichee sobre sus compañeros:

Ju:"-Aquel que está sentado solo es Óscar. Es bastante reservado pero es majo cuando coge confianza."

J:"-Los chicos que estiran son muy buenos amigos.”

Ju:”- El rubio es Fran. Es simpático, a veces demasiado...sobretodo con las chicas. Digamos que es un ligón."

Ju:"Albert, es el último en venir. Es el becado. La directora lo vió bailar en la calle y lo quiso en la escuela. Es de familia humilde, por eso crearon una beca solo para él. Cosa que no gustó a muchos. Nunca ha hecho ballet, pero la verdad que se esfuerza."

J:"-La chica que estira en el suelo es Silvia. Con esa tienes que tener cuidado. Es muy competitiva. Suele ser "prima ballerina" en las obras. Aunque teniendo a su madre en la junta quién no..."

Bruna se quedó mirando...le sonaba su cara...

¿cómo no se había dado cuenta? Es la niña gimnasta de la otra escuela... (BONUS al final del capítulo)

Y de repente llegó corriendo Martina, la compañera que faltaba y que parece que siempre llega tarde. Se presenta a Bruna y le da la bienvenida. Poco más, ya que acababa de entrar el profesor.

"Cada segundo pasado, es segundo perdido. ¡A la barra ya!"

Los alumnos se dirigen a la barra pero Bruna antes de llegar, le paró el profesor:

"-No me acordaba, hoy tenemos alumna nueva y como es costumbre y han hecho tus compañeros antes, tienes que bailarnos un solo."

Bruna se muere de la vergüenza.

B:"¿yo sola? Jaja, pero no he preparado nada.."

Profe:"-Nadie preparó nada. Debes improvisar...de esa manera rompemos el hielo."

Bruna piensa que no es lo mismo. Hoy bailaría solo ella ya que no estuvo el primer día y no vio el resto de compañeros. Pero bueno si hay que hacerlo, se hace...

Justo en ese momento llega la directora, que parece que no se quiere perder su momento.

El profesor tocó una melodía y Bruna empezó a improvisar. Por suerte conocía la pieza que tocaba y le resultó más fácil hacerlo.

Todos los compañeros se han sentado y miran fijamente a Bruna.

M:"-Es muy buena, ¿te has fijado en sus pies? Tiene una línea perfecta...."

S:"jum..."

Silvia, la excompañera de Bruna de pequeña se acaba de dar cuenta de quién es. Hasta ahora no había caído.

Cuando acaba de bailar el profesor la felicita. "Menos mal que era improvisación"- le dice

Cuando se gira para ir a la barra todos murmuran y Judith le susurra que lo ha hecho perfecto.

Cuando acaban la clase todos aplauden. Parece que les ha gustado mucho lo impartido hoy.

Bruna aprovecha para presentarse a todos, pues todavía no habían tenido tiempo de saludar.

Bruna intenta hablar con Silvia:

B:"-Ey Silvia, soy Bruna de la escuela de danza infantil."

S:"¡bá! Sí, me acuerdo, ¿y?"

Bruna, que pensaba que le haría ilusión encontrarse con una vieja amistad y romper un poco el hielo con el grupito, ve a Silvia comportarse como la estúpida que había sido siempre.

Silvia se marcha y Martina anima a Bruna que se había quedado un poco chafada.

M:"-Tía, no gastes energías con ella...no vale la pena. ¿Verdad que sí chicos?"

Albert:"-Sí, no te lo tomes a mal, parece que siempre vaya amargada."

B:"-Es que desde pequeñas me ha tratado mal. Y no se que es lo que le he hecho. Pensaba que ya no tendría ese rencor..."

Ó:"-Pues seguramente sea que te ve como una competidora y eso a ella no le hace nada de gracia."

Bruna se fijó mucho en este chico. Le gusta la mirada que tiene.

Durante el almuerzo, Silvia se ha acercado a Bruna y se ha sentado con ella.

S:"-Oye Bruna, lo siento. Pero tengo muy mal recuerdo de esa escuela. Mi madre me desapuntó por culpa de la tuya y yo lo único que quería era bailar."

B:"Tia, no te enteras...mi madre te estaba defendiendo. Tu madre no te trataba bien. Solo echaba mierdas de competiciones y eso no era sano para el resto de niños."

Silvia calla y escucha, sabe que tiene un poquito de razón, pero es su madre...

S:"-Mira yo había venido a disculparme pero decir eso de mi madre es muy feo. Ella solo ha querido lo mejor para mi."

B:"-Ya, déjalo, da igual...tú por tu sitio y yo por el mio."

Bruna siguió comiendo y Silvia se levantó y se cambió de lugar de almuerzo.

Al llegar a casa, y como empieza a ser costumbre de nuevo, Rubí la espera para preguntar que tal ha ido el primer día.

Bruna le cuenta todo pero ahora se siente agobiada porque tiene menos tiempo para hacer los trabajos de otras asignaturas.

Rubí no ha dudado en sentarse a ayudarla.

R:"-Nena, ¿qué haces?"

B:"-Subir una historia en simstagram de este momento, no muchos tienen la suerte de que su abuela la ayude."

BONUS

Hace unos años...

La primavera ha llegado y en la escuela de danza hoy es el día de los padres. Es un día en que los invitan para ver como van evolucionando.

Para los alumnos es muy importante, ya que es la primera vez que los ven bailar. La próxima vez será en el festival de final de curso.

Bruna y sus compañeros están atentos a las instrucciones que les está explicando la profesora a los padres, que ya están sentados esperando ver los ejercicios de barra.

Cris, la profesora les pide que se preparen a la barra. Mientras les explica a los padres que está muy contenta con este grupo, ya que han mejorado muchísimo y es uno de los mejores con los que ha trabajado.

Cristina marca los ejercicios de barra al ritmo del compás del pianista. A los niños se les nota un poco tensos al principio, pues sus padres estaban muy atentos y no estaban acostumbrados a sus miradas.

Los padres parecen emocionados de verlos y Sara está muy asombrada por su hija. De hecho se le escapa un "mi hija es asombrosa". Pero la mujer de al lado, no parece estar nada cómoda y Sara lo está notando.

Los niños siguen con los ejercicios que les marca, la verdad que muy bien coreografiados, todos a la vez.

"Parece mentira, en pocos meses lo que han cambiado, ¿verdad?"-le decía Sara a la madre que cada vez estaba más tensa.

Sara notaba a la mujer cada vez peor. No dejaba de murmurar "no puede ser, no..." Estuvo a punto de pedirle que parara, que le estaban escuchando todos y lo que era peor, los niños se estaban dando cuenta.

No la estaba dejando disfrutar del momento de su hija.

En cuanto acabaron los ejercicios, Cris les pidió a los niños que estiraran. Y cuando acabó de decirlo, respiró hondo y se giró hacia la madre que no había parado de protestar.

C:"-¿qué pasa ahora?"

"-Todos estos niños han avanzado mucho y yo a mi hija la veo igual que el primer día. Mi hija necesita ir a un curso superior para que no la atrasen."

Sara estaba atragantándose con su propias saliva de oír semejante conversación delante de todos.

"-No voy a permitir que eches a perder todo el trabajo que hemos hecho mi hija y yo."

Sara no sabe donde meterse. El otro padre se lo toma a cachondeo y más viendo como se está poniendo de nerviosa de escucharla: "es una exagerada, no le hagas caso."

La madre histérica le pide a su hija que vaya con ella y la niña obedece.

-"Silvia, nos vamos..."

-"¡Pero mamá no quiero...!"

-"Tú calla y obedece."

La niña seguía insistiendo que por favor no quería cambiar de escuela otra vez. Y a Sara se le estaba acabando la paciencia de escuchar semejantes barbaridades a una simple niña.

Así que se levantó y se dirigió a intentar calmar los ánimos de esa señora.

S:"-Oye, no seas tan exigente. Es solo una niña, no necesita que seas tan dura con ella."

"-¿Quién eres tú para meterte en mis asuntos?"

S:"-Soy una madre que está harta de oír como desprecias a tu hija."

S:"-Mi hija está aquí para disfrutar de algo que le apasiona y no me apetece que vengas con tus aires de competición y hables así a tu hija mientras la mia está al lado. Esto no es una competición de gimnasia y mucho menos un lugar donde hacer comparaciones con niños."

Mientras las dos madres discuten, Silvia se acerca a Bruna y empieza a burlarse de ella.

-"Vamos hija, no hace falta que malgastes energía con esta gente. No vale la pena. Seguiremos buscando la escuela que valore tu esfuerzo."

-"Pero mamá..."

-¡Basta! Nos vamos..."